Poco a poco, la gente inventó criaturas míticas como explicaciones de las cosas que observaban en el mundo natural: es posible que la gente haya vislumbrado brevemente a un animal, y eso puede haber sido suficiente para poner su imaginación a toda marcha. Los animales confundidos con criaturas míticas incluyen manatíes, calamares gigantes y coyotes; en las condiciones adecuadas, estos seres se convirtieron en sirenas, kraken y chupacabras.
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Al igual que los animales de ficción que alguna vez se creyeron reales, las criaturas míticas también reflejan la cultura que las imaginó. La cristiandad medieval, por ejemplo, reinventó los unicornios de acuerdo con su sistema de creencias. De manera similar, cuando las personas se encontraron con restos fosilizados de animales prehistóricos que nunca antes habían visto, no tenían forma de conceptualizarlos o comprenderlos. Así que los interpretaron en su propia mitología, viéndolos como evidencia de criaturas desaparecidas de una era anterior de la humanidad.
Todos los animales de esta lista han sido confundidos con criaturas míticas y, por lo tanto, han sido trampolines para cuentos de advertencia, leyendas oscuras y mitos mágicos que revelan la infinitud de la imaginación humana.
