Un hombre estadounidense murió en un ataque ruso en la ciudad de Chernihiv, en el norte de Ucrania, donde buscaba tratamiento médico para su pareja.
La muerte de Jim Hill, de Diggs, Idaho, fue reportada el jueves por su hermana. En una publicación de Facebook, dijo que él estaba esperando en una fila de pan con otras personas cuando fueron abatidos a tiros por francotiradores militares rusos. Funcionarios ucranianos informaron que 10 personas murieron el miércoles en Chernihiv mientras esperaban en la fila del pan.
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El secretario de Estado, Antony Blinken, confirmó la muerte de un estadounidense durante una conferencia de prensa el jueves.
La policía de Chernihiv y el Departamento de Estado de EE. UU. también confirmaron la muerte de un estadounidense, pero no lo identificaron. Hill fue al menos el segundo ciudadano estadounidense asesinado en el conflicto.
«Mi hermano Jimmy Hill fue asesinado ayer en Chernihiv, Ucrania. Estaba esperando en una fila de pan con otras personas cuando fueron baleados» por las fuerzas militares rusas, escribió su hermana, Cheryl Hill Gordon, en Facebook. Su cuerpo fue encontrado en la calle por la policía local.
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En conmovedoras publicaciones en Facebook en las semanas previas a su muerte, Hill describió «bombardeos indiscriminados» en una ciudad sitiada y bromeó sobre querer parecer «débil mental» si los rusos lo capturan.
Debajo de una foto suya, escribió el 8 de marzo: «Yo sin afeitar durante 10 días. De hecho, estoy tratando de parecer lo más viejo y débil mental (no duro) posible en caso de que me atrapen. Estoy trabajando en mi acento de Rainman». Oh chico’…»
Hill, nativo de Eveleth, Minnesota, que vivía en Driggs, Idaho, se identificó como profesor en universidades de Kiev, la capital de Ucrania, y Varsovia, Polonia. Dijo que estaba en Chernihiv con su pareja para que ella recibiera tratamiento médico.
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“Nos alojamos en el tercer piso del hospital. La mayoría de los pacientes en el refugio antiaéreo del sótano. Pero allí hace frío y no hay internet”, escribió el 26 de febrero, dos días después de que comenzara la invasión.
Cuatro días después, dijo: «Nadie en Chernihiv está a salvo. Bombardeos indiscriminados… Las fuerzas ucranianas controlan la ciudad pero están rodeadas. Aquí hay un asedio. Nadie entra. Nadie sale».
Al menos 53 personas fueron llevadas a las morgues en las últimas 24 horas, muertas durante fuertes ataques aéreos rusos y fuego terrestre en Chernihiv, dijo el gobernador local, Viacheslav Chaus, a la televisión ucraniana el jueves.
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