Las familias inmigrantes comienzan a abandonar los hoteles de Nueva York cuando llegan los primeros avisos de desalojo

NUEVA YORK (AP) — Familias inmigrantes fueron trasladadas el martes fuera de un hotel del centro de Manhattan como parte del plan del alcalde Eric Adams para aliviar la presión sobre el tenso sistema de albergues de la ciudad de Nueva York imponiendo un límite de 60 días a las estadías en los albergues.

Las aproximadamente 40 familias que abandonaron Row NYC, en el corazón del distrito de teatros de la ciudad, son las primeras de decenas de familias que se espera que abandonen los refugios de la ciudad en las próximas semanas. Algunos de los que se marcharon el martes volvieron a solicitar camas inmediatamente, mientras que otros dijeron que habían logrado encontrar alojamiento más permanente fuera del sistema.

Adams, un demócrata, impuso el límite en octubre para las familias inmigrantes sin hogar, diciendo que la medida era necesaria para aliviar un sistema de refugio abrumado por los solicitantes de asilo que cruzan la frontera sur de Estados Unidos.

María Quero, una venezolana de 26 años que está embarazada de casi nueve meses, estaba entre los que se encontraban afuera del hotel Row el martes por la mañana con su equipaje y otros efectos personales a cuestas.

Dijo que su plan era cruzar la ciudad hasta el Hotel Roosevelt, otro alojamiento en el centro de la ciudad que ha sido reutilizado como centro de admisión para los inmigrantes que llegan. Allí, dicen los funcionarios de la ciudad, las familias inmigrantes podrían volver a solicitar otra estadía de 60 días en el sistema de refugio.

“No tenemos idea de lo que va a pasar allí”, dijo Quero en español mientras su esposo, David Domínguez, recogía sus pertenencias para la caminata de aproximadamente 20 minutos. “Es muy estresante. Me da mucha ansiedad”.

Los dos, que llegaron al país hace seis meses y habían estado en el Row durante cinco meses, dijeron que no tienen amigos ni familiares con quienes puedan quedarse si no pueden conseguir otra cama en la ciudad.

“Esperemos que tengamos un lugar adecuado. Conocemos a personas que han estado en las tiendas de campaña mientras estaban embarazadas”, añadió Domínguez, refiriéndose a los refugios temporales que la ciudad ha erigido en Brooklyn para albergar a los recién llegados. «Una mujer no puede estar en una tienda de campaña cuando está embarazada».

La administración Adams ha advertido durante semanas que nadie que busque una nueva colocación tiene garantizada otra cama.

Pero Adams y otros funcionarios de la ciudad dijeron el lunes que darían prioridad a las familias y tratarían de ubicarlas cerca de las escuelas de sus hijos para minimizar cualquier interrupción en su educación.

“Esta no será una ciudad donde vamos a colocar a niños y familias en la calle y hacerles dormir en la calle”, dijo Adams antes de las mudanzas del martes. «Eso no va a pasar.»

Los defensores de los inmigrantes han realizado manifestaciones en los últimos días diciendo que la nueva política podría llevar a las familias a hacer largas colas en el frío intenso para conseguir un nuevo refugio, la situación que han enfrentado los adultos inmigrantes solteros desde el otoño, cuando se les limitó a 30 días en refugios de la ciudad.

Los límites de tiempo también podrían perturbar la escolarización de los niños inmigrantes que podrían tener que cambiar de escuela si sus familias se trasladan a otro lugar, dicen los defensores.

El contralor de la ciudad, Brad Lander, dijo el martes que está iniciando una investigación sobre la implementación de la política de 60 días por parte de la administración Adams, incluso si se explicó adecuadamente a las familias y sus costos finales.

“¿Qué información se proporciona realmente a la gente? ¿Existen protocolos para los desalojos de 60 días?” dijo afuera del hotel Row mientras las familias se marchaban.

Se han enviado unas 4.800 notificaciones de desalojo a familias inmigrantes alojadas en albergues.

Mayra Martínez, una madre colombiana de 40 años, dijo que sus tres hijos tienen sentimientos encontrados acerca de dejar el Row.

La familia había estado viviendo en el hotel durante más de un año y había ahorrado lo suficiente para alquilar un apartamento de tres habitaciones en la cercana Newark, Nueva Jersey.

“Les gusta aquí, pero no se puede cocinar en el hotel y extrañan la comida casera”, dijo Martínez en español mientras ella y su esposo cargaban sus pertenencias en un viaje compartido que los esperaba. “También están un poco tristes por su escuela. Tendrán que cambiarse y acostumbrarse a una nueva escuela”.

Los desalojos de hoteles se produjeron cuando los funcionarios de la ciudad también evacuaron temporalmente a casi 2.000 inmigrantes alojados en Floyd Bennett Field, el antiguo aeropuerto de Brooklyn, antes de una tormenta potencialmente dañina. La administración de Adams había erigido el refugio temporal en el aeródromo en respuesta a las oleadas de nuevos inmigrantes que llegaban a la ciudad.

«Para ser claros, esta reubicación es una medida proactiva que se está tomando como medida de precaución para garantizar la seguridad y el bienestar de las personas que trabajan y viven en el centro», dijo Kayla Mamelak, portavoz de Adams, en un comunicado. «La reubicación continuará hasta que las condiciones climáticas que puedan surgir se hayan estabilizado y las instalaciones vuelvan a estar aptas para vivir».

Los residentes, muchos de ellos familias con niños, fueron enviados a la cercana escuela secundaria James Madison, también en Brooklyn.

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La reportera de Associated Press Jennifer Peltz contribuyó a este artículo.

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