
A veces, el picante puede ser como ese exnovio del que nos recomiendan alejarnos: nos hace llorar hasta enrojecer, pero no podemos dejarlo. Incluso si nuestra tolerancia al picante es baja, hay ocasiones en que no podemos resistir un buen platillo con altos niveles de picante. El porqué nos atrae tanto la comida picosa va más allá del gusto de cada persona, pues las especias y los chiles activan receptores nerviosos que liberan endorfinas, lo que no solo reduce el estrés, sino que nos llena de energía y entusiasmo. Ya sea que estés en busca de tu próxima aventura culinaria o quieras saber cuáles platillos deberías evitar si tu tolerancia al picante es baja, sigue leyendo: en este artículo tenemos las respuestas sobre algunas de las gastronomías más picantes del mundo.