Los candidatos republicanos restan importancia al aborto, pero el tema sigue apareciendo

Agentes de policía de la Corte Suprema de Estados Unidos levantaron barricadas para separar a los activistas antiaborto de los activistas por el derecho al aborto durante una manifestación frente a la Corte Suprema en Washington, DC, el 24 de junio de 2024.

Jim Watson/AFP/Getty Images

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Durante generaciones, el Partido Republicano hizo campaña para eliminar el derecho al aborto en Estados Unidos. Ahora, divididos entre una base que quiere más restricciones a la atención de la salud reproductiva y una mayoría moderada que no las quiere, parece que muchos republicanos prefieren tomar una salida antes que una vuelta de la victoria.

Y aún así, no pueden evitar hablar de ello.

El punto culminante de la política para los opositores al aborto: la decisión de 2022 de la Corte Suprema de anular Roe contra Wade – está demostrando ser un punto bajo para el apoyo público a su causa. Más adultos estadounidenses se consideran “pro-elección” que en cualquier otro momento de los últimos 30 años, según una encuesta reciente de Gallup: el 54%, en comparación con el 41% que se identifica como “pro-vida”.

La tendencia está cambiando incluso cuando algunos conservadores buscan restricciones a los tratamientos anticonceptivos y de fertilidad. Una nueva encuesta de la KFF entre mujeres votantes encontró que los demócratas son más propensos que los republicanos a decir que el aborto es el tema más importante en su voto para presidente, un cambio respecto de las elecciones recientes. Una de cada cinco mujeres menores de 30 años y el 13% de las menores de 50 años dijeron que es su principal preocupación. Entre los independientes, el 81% dijo que creía que el aborto debería ser legal.

Los demócratas cuentan con esta cuestión para ayudar a obtener sus votos y garantizar la reelección del presidente Joe Biden, a pesar de la persistente insatisfacción con su liderazgo. El aborto podría resultar particularmente perturbador en los estados en disputa que se espera tengan iniciativas en la boleta electoral para consagrar el acceso al aborto en las constituciones estatales, incluidos Arizona y Nevada.

Ocho de cada 10 mujeres demócratas en estados con posibles medidas electorales dijeron que estaban “absolutamente seguras” de que votarían, y también dijeron que era más probable que respaldaran a Biden en comparación con las mujeres demócratas en otros estados, encontró KFF.

Hasta ahora, los partidarios del derecho al aborto han prevalecido en cada uno de los siete estados que han presentado iniciativas electorales a los votantes, incluso en estados donde los republicanos controlan las legislaturas, como Kansas, Ohio y Kentucky. Aproximadamente dos tercios de las mujeres en Arizona dijeron a KFF que apoyan la Iniciativa por el Derecho al Aborto propuesta por el estado, incluido el 68% de las independientes.

En la campaña electoral, los republicanos están haciendo todo lo posible por evitar el tema, incluso cuando eso significa distanciarse de sí mismos. El expresidente Donald Trump, que ha adoptado algunas posturas diferentes desde que se autodenominó “proelección” en 1999, supuestamente instó a los legisladores durante una reciente visita a puertas cerradas al Capitolio a no eludir el tema, pero también a apoyar excepciones a las prohibiciones, incluso para proteger “la vida de la madre”.

En el crucial Arizona, la candidata republicana al Senado de los Estados Unidos, Kari Lake, quien adoptó una prohibición casi total del aborto mientras se postulaba para gobernadora hace dos años, dijo recientemente “La gente no está de acuerdo con una prohibición total del aborto”. En Nevada, el candidato republicano al Senado, Sam Brown, que en 2022 encabezó una rama de un grupo conservador antiabortista, ha dicho que respetará la permisiva ley del aborto de su estado y que no votaría a favor de una prohibición a nivel nacional si fuera elegido.

La Corte Suprema mantiene el tema en primer plano. En una decisión del 27 de junio, el tribunal dejó legales los abortos de emergencia en Idaho, un estado con una prohibición estricta, aunque la cuestión sigue sin resolverse a nivel nacional. La jueza Ketanji Brown Jackson, que se unió a la mayoría en un fallo inusual que devolvió el caso al tribunal inferior y declaró que había sido aceptado prematuramente, acusó a sus colegas de perder el tiempo en el tema.

“Las personas embarazadas que experimentan condiciones médicas de emergencia siguen en una posición precaria, ya que sus médicos no saben qué exige la ley”, escribió.

La encuesta de KFF encontró un amplio y fuerte apoyo para preservar el acceso al aborto en casos de emergencias relacionadas con el embarazo: el 86% de las mujeres votantes, incluido el 79% de las mujeres republicanas, apoyan las leyes que protegen el acceso en esas circunstancias.

A mediados de junio, el tribunal rechazó un intento de revocar la aprobación de la píldora abortiva mifepristona por parte de la FDA, que se había aprobado hace 24 años, pero sólo por un tecnicismo. Sin una decisión concreta sobre el fondo del caso, los jueces dejaron abierta la posibilidad de que diferentes demandantes pudieran provocar un resultado diferente. Sin embargo, el impulso para redefinir la atención de la salud reproductiva después de laRoe contra Wade continúa. La influyente Convención Bautista del Sur, evangélica, pidió recientemente importantes restricciones legislativas a la fertilización in vitro, que sus miembros consideran moralmente incompatible con la creencia de que la vida comienza con la fertilización.

Los grupos que se oponen al aborto están presionando a Trump para que no descarte un punto central de la plataforma presidencial del Partido Republicano desde 1976: la prohibición federal del aborto. Trump ha dicho recientemente que los estados deberían tomar sus propias decisiones sobre si restringir o no el aborto.

Los demócratas y los grupos alineados con los demócratas están explotando el malestar de los republicanos con el tema. El día que los demócratas del Senado forzaron una votación sobre una legislación que habría garantizado el derecho federal a la anticoncepción, un grupo llamado Estadounidenses por la Anticoncepción hizo flotar un globo gigante con forma de DIU cerca del Capitolio. (Los republicanos bloquearon el proyecto de ley, como se esperaba, y sin duda los demócratas se lo recordarán con frecuencia a los votantes más adelante este año).

Una semana después, los demócratas del Senado intentaron presentar un proyecto de ley para garantizar el acceso a la FIV, que los republicanos también rechazaron. Sin embargo, no se trató de un globo gigante.

Los republicanos todavía parecen tener esperanzas de poder evitar responsabilidad por la impopularidad de sus posiciones en materia de salud reproductiva, aunque sólo sea destacando otros temas que esperan que a los votantes les importen aún más, en particular, la economía. Pero algo que es poco probable que logren es mantener el tema fuera de las noticias.

Noticias de salud de KFF es una sala de redacción nacional que produce periodismo en profundidad sobre temas de salud y es uno de los principales programas operativos de KFF — una fuente independiente de investigación, encuestas y periodismo sobre políticas de salud.