
¿Te cuesta quedarte quieta para meditar? ¿Tu mente no se apaga ni siquiera cuando cierras los ojos? ¡Tranquila, no estás sola! Cada vez más personas están descubriendo una forma diferente de meditar que no requiere silencio absoluto ni posturas estáticas: estamos hablando de la meditación en movimiento.Esta práctica, que combina respiración, música, movimiento libre y atención plena, se ha convertido en la favorita de quienes tienen mentes inquietas o no conectan con las formas tradicionales del mindfulness. Bailar como forma de meditación no solo es liberador, también puede traer beneficios profundos para el cuerpo y la mente. ¡Sigue leyendo y averígualos!